El pasado 2 de diciembre fue inaugurada en el museo de Bellas Artes de nuestra ciudad la exposición “Valdés Leal (1622-1690)” organizada con motivo del IV centenario del nacimiento del famoso pintor del periodo barroco, que fue miembro de la Hermandad Sacramental de la Parroquia de San Andrés.
La muestra, que estará abierta hasta el 27 de marzo de 2022, ofrece a través de 88 piezas -65 préstamos de diversas colecciones españolas y extrajeras, y 23 del propio museo sevillano- una visión actualizada de la obra de este artista, fundamental en la escuela sevillana de la segunda mitad del siglo XVII.
la imagen ha sido restaurada por el taller de restauración del Arzobispado de Sevilla
En la misma figuran dos esculturas originales de Valdés Leal, siendo una de ellas la imagen de Nuestra Señora del Rosario que preside el retablo del sagrario de San Andrés. Esta talla, de indudable valía artística y de singular belleza, había sido atribuida con anterioridad a autores como Pedro Roldán o Hita del Castillo, pero quedó asignada a la producción de Valdés Leal en el año 2001 gracias a los estudios del profesor José Roda Peña.
Altar de la Capilla Sacramental de San Andrés
Según el profesor Delgado Aboza, en su obra “La Hermandad Sacramental de San Andrés de Sevilla” (2015), describe a la Virgen “sentada sujetando con ambas manos a su hijo, que se muestra de pie sobre su rodilla derecha. Sin duda, los pliegues del manto, la postura diagonal de las piernas y el suave giro del torso de la Virgen hacia la derecha proporcionan al conjunto un especial dinamismo. Respecto al Niño, vemos que su anatomía está tratada de una manera blanda, destacando su rostro mofletudo y la disposición de sus brazos, el izquierdo reposado sobre el pecho materno y el derecho adelantado y elevado para ofrecer a los fieles un rosario”.
Por inventarios antiguos sabemos que antaño tanto la imagen de la Virgen como del Niño contaron con varios juegos de coronas y cetros, además de una medialuna y otras joyas, así como aparecía revestida de manto y toca pues figuran registradas diversas piezas textiles de distintos tejidos y colores.
Para esta exposición la imagen ha sido restaurada por el taller de restauración del Arzobispado de Sevilla, que depende de la Delegación de Patrimonio Histórico que dirige el sacerdote D. Antonio Rodríguez Babío. Los trabajos han sido dirigidos por el licenciado conservador D. Agustín Martín de Soto y D. Antonio Gamero Osuna y han devuelto a la luz los grandes valores plásticos de esta efigie tan destacada de nuestra parroquia y hermandad.