En el Quinario del año 2017 se estrenaron unas “Coplas al Santísimo Cristo de la Caridad”, compuestas por N.H.D. Antonio Martínez Oliva, destacado músico y compositor que ya ha dedicado varias obras a nuestros Titulares, quien las ofrenda a la Hermandad para que puedan ser cantadas en los cultos y unan nuestras voces en la oración a nuestro venerado Titular. Ofrecemos la letra de las mismas, original de N.H.D. Francisco José Vázquez Perea, destacado poeta y escritor, Pregonero de la Semana Santa 2003.
Las coplas fueron interpretadas todos los días del Quinario por la Agrupación Musical Portuense que se encarga de la parte musical de nuestros cultos desde hace varios años. Especialmente brillante resultó la interpretación en la Función Principal de Instituto con la presencia del coro al completo.
Impresiones sobre la composición de las “Coplas al Santísimo Cristo de la Caridad”
Antonio Martínez Oliva
Músico y compositor
Hermano de Santa Marta
¿Cómo se construye la composición de una pieza musical?
Cuando la pieza tiene letra, como es el caso de las “Coplas”, has de dejar que aquella penetre dentro de ti y te remueva de alguna forma, creando sentimientos.
Tienes que leerla muchas veces, hasta que, en tu interior, te diga algo “musical”.
Nuestras “Coplas” tienen tres Estrofas y un Estribillo.
En un principio, como suele ser normal en este tipo de piezas, pensé en hacer la misma melodía para las tres estrofas. Pronto deseché tal idea, porque cada una tiene una “vida” diferente.
En la primera Estrofa, escogí las voces masculinas, Bajo y Tenor, buscando un ambiente de paz y meditación. Está en modo menor, más recogido.
En la segunda, introduzco la voz de Contralto (voz grave de mujer) que, al principio, juega con la del Tenor, para dar paso a un dúo entre las voces femeninas (Soprano y Contralto). Seguimos en modo menor.
La tercera, nos habla de Resurrección, la muerte ha sido vencida (“quiero vivir tu muerte como vida y surtidor”). Aquí ya van unidas las cuatro voces del Coro (Soprano, Contralto, Tenor y Bajo). Empieza con todas las voces al unísono, destacando la Resurrección, con simpleza musical, pero con fuerza. Acto seguido, el “estremecimiento del sepulcro” y cómo brilla la luz como el Sol. Toda esta estrofa ya está en modo mayor, solemne, luminoso, brillante.
Por último, detrás de cada Estrofa viene el Estribillo, que está en modo Mayor, con él he querido destacar la alegría de la Caridad, la alegría de poder “abrir el sepulcro con nuestra oración”.