El próximo martes 7 de junio, a la terminación del culto semanal, tendrá lugar en la Casa-Hermandad la entrega de una contribución económica por parte de la Diputación de Caridad a la misión que el «Hogar de Nazaret» mantiene en Quinindé (Ecuador).
Representantes del Hogar de Nazaret junto al sacerdote Don Juan Luis García, Párroco de San Joaquín, nos acompañarán este día en nuestra Casa para compartir un rato de convivencia, así como la proyección de un video que muestra la realidad de la vida cotidiana en aquella región del norte del país ecuatorial, en plena selva amazónica, donde se encuentra la misión que atiende esta institución caritativa eclesial.
La contribución económica que le entregará la Hermandad corresponde al presupuesto ordinario de la Diputación de Caridad del presente ejercicio 2015-2016, y será llevada al país hispanoamericano por el sacerdote Juan Luis García en un nuevo viaje que realizará a partir del próximo 25 de junio, en que encontrará un panorama aún más empobrecido que en su primera estancia, tras los terremotos que asolaron el país andino los meses de abril y mayo.
La última réplica, de 6,8 grados en la escala de Richter, tuvo lugar el pasado 18 de mayo a solo 34 kilómetros al noroeste de Quinindé, en la provincia de Esmeraldas. Casas, escuelas, carreteras, negocios e iglesias sucumbieron a las embestidas de la tierra dejando un horizonte desolador y decenas de familias rotas.
«La misión originaria iba a dedicarse precisamente a las familias, a reforzar los vínculos, porque el maltrato, la violencia y el abandono de los hijos es común allí. Sin embargo, tras los terremotos, lo que nos piden son medicinas y dinero para la reconstrucción de la zona», cuenta el párroco de San Joaquín, en Triana.
si reconstruimos una casa, estamos pagando al albañil y al resto de puestos indirectos que tienen que ver en el proceso
El Hogar de Nazaret, que abrió sus puertas hace 15 años en Quinindé, está formado por una residencia para niñas abandonadas -cuyo cupo han aumentado tras los terremotos al quedar huérfanas algunas niñas- y un colegio dirigido por Manuel Menjíbar y su mujer, un matrimonio que dejó hace ocho años en Sevilla su acomodada vida para servir en esta comunidad. Se trata de una escuela a la que asisten unos 500 alumnos, en la que el 60% de los niños están en riesgo de exclusión, pero que asisten gracias a la contribución de familias españolas que becan sus estudios.
Porque pese a que los gobiernos de los distintos países europeos, además de otras partes del continente americano y asiático han enviado ayuda a Ecuador, «la realidad es que no llega. Hay una mafia tremenda y toda esa ayuda se queda en el camino. La mejor opción es recaudar fondos para luego poner en movimiento ese dinero sobre el terreno. Así, si reconstruimos una casa, estamos pagando al albañil y al resto de puestos indirectos que tienen que ver en el proceso. Es una forma de activar la economía del lugar», asegura el padre Juan Luis García.
En 2014 colaboramos con el «Hogar de Nazaret» en Sevilla
Precisamente en el mes de junio del año 2014 nuestra Hermandad de Santa Marta, a través del Fondo de Acción Social, entregó una importante contribución económica a esta misma institución para amueblar y dotar de los elementos necesarios para la vida cotidiana a un piso de acogida para niños abandonados que el Hogar de Nazaret mantiene en nuestra ciudad.
La hermana Consuelo Csanady dirige el Hogar de Nazaret, que en la capital hispalense suma tres residencias: dos para niños con algún tipo de discapacidad (tutelados por la Junta de Andalucía) y una tercera dirigida a los hijos de madres inmigrantes que trabajan todo el día. Ésta última, en la que hay acogidos 14 niños, está ubicada en lo que fue la antigua casa sacerdotal junto a la parroquia de San Joaquín. El perfil de las madres que se ven obligadas a dejar allí a sus hijos por falta de recursos es el de una chica joven, latinoamericana, que se quedó embarazada al llegar a España, sin que su pareja se hiciera cargo después del bebé. Muchas de ellas tienen estudios, pero al no poder convalidar sus títulos, se ven abocadas a trabajar como empleadas del hogar.
Recientemente, el pade Juan Luis García ha sido entrevistado por ABC de Sevilla dando testimonio de la realidad que se vive en Ecuador: "Padrecito, hábleme de Dios".
Fuente: Abc de Sevilla