El martes, 19 de junio, finaliza el ciclo de “Cristianismo y Sociedad” del presente curso, con un acercamiento a la figura del Papa Francisco como líder mundial y espiritual. Para ello, D. Oscar Díaz Malaver, Vicario Episcopal para la Nueva Evangelización, no acercará la apasionante personalidad del sucesor de Pedro.

Desde la humildad y con un discurso valiente y actualizado, el Papa Francisco es el líder mundial, el único, respetado y valorado por cristianos de todas las iglesias; ateos y fieles de otras confesiones; poderosos y aquellos que, frustrados, cansados y desilusionados con los opulentos ven en el mensaje que transmite Su Santidad la única esperanza para que nuestro mundo sea mejor.

el Papa Francisco es el líder mundial, el único, respetado y valorado por cristianos de todas las iglesias; ateos y fieles de otras confesiones.

Cuando el Papa expresa que ““hay que salir de nuestra esfera de confort y bienestar personal para ir en búsqueda de los que viven en extrema pobreza” lanza un mensaje de esperanza y una invitación clara que nos debe animar a trabajar en el empeño más importante de todo cristiano como es buscar el bienestar del más necesitado.

Podríamos considerar su “una Iglesia pobre para los pobres” como el lema del inicio de su pontificado con el que ya nos podíamos hacer una idea de las intenciones de su pontificado.

Pero porqué Jorge Bergoglio goza de la admiración de tantos. Su Santidad ejerce este liderazgo sin miedo, conocido es su gestión que ha mejorado la relación entre Cuba y Estados Unidos o su implicación en el gran problema que vive Nicaragua; predica con el ejemplo, conmovedoras fueron sus declaraciones y su “grito de dolor” tras la visita a Lampedusa tras el naufragio con 93 víctimas: “«sólo me viene la palabra vergüenza, es una vergüenza». Estas declaraciones movieron las conciencias de las personas y poco, los reiterados naufragios lo demuestran, la de los gobiernos.

Su cercanía con la gente, sin atender al credo, ha conmovido a muchos que han visto al Papa Francisco a un hombre cercano y afectuoso. Emocionante las imágenes, sentado a la mesa con los trabajadores del Vaticano, o parando el auto que lo trasladaba para transmitir un gesto de cariño a quien entendía que más lo necesitaba.

Con mucha frecuencia, el Papa trata asuntos sociales, políticos, económicos y ecológicos para derramar sobre ellos la luz del Evangelio.

En fin, un hombre que es una gracia de Dios para la Iglesia y una esperanza para el mundo.